Fuerza en el Corazón

por Tabatha

Autor: María Larrauri

Todas las personas, alumnos y adultos que conformamos la Secundaria Federal No. 3 tenemos defectos y virtudes como todos, pero tenemos una singular característica; somos “fuertes de corazón”, hemos aprendido de una y de otra manera a tomar decisiones, a respetarnos, a querernos, a convivir, todo esto no quiere decir que algunas veces tengamos nuestras diferencias, también sabemos enojarnos y cuando algo no nos parece correcto no lo aceptamos, pero al mismo tiempo somos sensibles, reconocemos nuestros errores, de varias maneras sabemos pedir perdón y perdonar. Conocemos y practicamos la solidaridad y nos reconocemos como “Búfalos” que es nuestro logo y nos sentimos orgullosos de serlo.

Pues bien… dentro de las paredes que resguardan a este grupo de personas ocurrió una mañana lo que a continuación te contaré: A las 7:50 de la mañana llegó sola y se metió al edificio una cachorrita de aproximadamente mes y medio de edad, realmente llamaba la atención porque había algo muy extraño en ella y al observarla no sabías lo que era… pero fue una sorpresa tan desagradable para cada uno de todos aquellos que la vimos, esta pequeña perrita no tenía orejas, al verla de cerca se observaba que donde deberían de estar, había pus, gusanos y de un lado se alcanzaba a ver el hueso.

Sentimos una mezcla de enojo, dolor, sorpresa, compasión y nos fue muy difícil creer que alguien hubiera sido capaz de lastimar de esta forma a un ser vivo, que siente el dolor igual que todos nosotros y además con apenas un mes de vida no pudo defenderse.

Algunos alumnos nos informaron, que in joven que no pertenece a la escuela, le amarró unas ligas en las orejas por 15 días para que se pudrieran, después se las cortó con una navaja, hizo todo esto para que tuviera un aspecto de perra de pelea, cuando la cachorra perdió el conocimiento por el dolor, la dio por muerta y la tiró al arroyo.

La gente de esta escuela no se quedó pasiva como mucha otra lo habría hecho, pensando tan solo “pobre animalito- que barbaridad” ¡al contrario!, hubo una rápida organización y entre alumnos, conserjes, maestros, directivos, etc.   Se hizo una “cooperacha” y con ese dinero la llevamos con una veterinaria, conocida en Chihuahua por su trabajo en beneficio de los animales; rápidamente la atendió, la anestesió y tomó piel sana del cuello para sustituir la podrida o necrozada.

La cachorra, a pesar de haber sufrido ese abuso quería vivir y con su tierna mirada pedía ayuda, pues los animales domésticos pocas veces lo pueden hacer por sí mismos.

Recuerda siempre que estos animales dependen totalmente de los seres HUMANOS.

Este animalito movilizó a más de 400 personas, que de una u otra manera participamos en esto y al pasar el tiempo y al tener noticias de que se reponía y al recordar la respuesta y las reacciones de compañeros y alumnos, comprendí que su instinto fue en verdad sabio y la llevó al mejor lugar, al único sitio donde recibiría lo que necesitaba para sobrevivir: AYUDA.

Fue adoptada por la maestra Amarabi y los muchachos la llamaron “Pelona”, actualmente está sana y vive disfrutando la vida, con una familia que la cuida, la protege, le proporciona alimento, protección y amor.

Nosotros “Los Búfalos” estamos convencidos de que todos los animales merecen respeto y amor, como cualquier ser vivo, como tú y como yo.

Si tienes cerca de ti un animal EVITA MALTRATARLO Y NO PERMITAS QUE OTROS LO HAGAN, hacer eso es una costumbre equivocada que debe cambiar.